Supernaut
En la universidad consulté el correo. Me había escrito. Y me daba buenas noticias (o así las interpreté). Y aunque en la biblioteca habían extraviado tres libros míos, y había perdido una beca ese mismo día a causa de la endogamia y el nepotismo, me sentía como un gigante. Estaba en clase y era como una nova a punto de explotar. La euforia era total, corría por mis venas y me daba toda la vida de la que había prescindido en semanas. Tan fuerte es el poder de la pasión.
2 comentarios
Marta -
Un beso!
Corazòn... -
¿De qué valdría la vida?
Saludos.
;o)